Amena y salpicada de anécdotas y sucesos que cambiaron el curso del boxeo, así resultó la WBC Talks 41, en donde Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo, tuvo como invitados a Elizabeth Reyes, directora adjunta de Cleto Reyes, y a su esposo Guillermo Moreno, de CRUSA.
Por Rodolfo Rosales S.
Amena y salpicada de anécdotas y sucesos que cambiaron el curso del boxeo, así resultó la WBC Talks 41, en donde Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo, tuvo como invitados a Elizabeth Reyes, directora adjunta de Cleto Reyes, y a su esposo Guillermo Moreno, de CRUSA.
Fue una charla con mucho punch, porque no sólo se dejó de manifiesto la histórica amistad de las familias Sulaimán y Reyes, sino la manera en que el organismo verde y oro y Cleto Reyes han caminado por el mundo del boxeo.
En la WBC Talks 41, Mauricio Sulaimán, contó con la participación de Xóchil Lagarda, la directora de la WBC University, Pepe Toño Sulaimán y Víctor Silva.
En su primera intervención, Elizabeth Reyes, tras escuchar de labios de Pepe Toño, que él estaba en el boxeo y el WBC por su abuelo Don José Sulaimán y de Don Alberto Reyes, afirmó que “estamos orgullosos de estar aquí, con la mejor intención de preservar ese legado de calidad moral y empresarial”.
Recordó que fue a partir de 1988, en la Convención del WBC, en la Ciudad de México, cuando su papá, Don Alberto, comenzó a participar en ellas, hasta el año de 2018 y que durante ese tiempo ambas familias han compartido muchas cosas.
En ese momento terció Guillermo Moreno, quien recordó que fue Mauricio Sulaimán el primero en enterarse del compromiso matrimonial y fue el propio presidente del WBC quien narró el hecho: “No se me olvida eso, entramos mi esposa Crhistiane Manzur y yo a un restaurante, ahí estaban Elizabeth y Guillermo, los saludamos; luego bajaron una canasta y de ahí sacaron el anillo de compromiso, así que gorreamos champaña”… “hasta en eso me siguió el boxeo”, manifestó Elizabeth y todos echaron a reír.
A la pregunta que ¿qué es Cleto Reyes?, Eli respondió: “Justamente este año celebramos el centenario del natalicio de mi abuelo y estamos de fiesta honrando su memoria. Don Cleto Reyes nació en una familia humilde. Le gustaba hacer deporte, jugaba beisbol y trabajaba en un taller de manoplas de beisbol. En ese tiempo estaba viva la trilogía de Juan Zurita-Rodolfo Casanova-Joe Conde y mi abuelo participó en una pelea de espontáneos y dio un peleón que hasta le aventaron dinero, pero fue sui debut y despedida”.
Agregó que no se volvió a subir al ring, “pero se llevó los guantes para repararlos y otros boxeadores le llevaban sus guantes a compostura; así que por esa pelea y su habilidad para reparar guantes, se hizo famoso” y así nacieron los guantes de los campeones.
Dijo que antes los guantes tenían un relleno muy duró, que provocaba que los golpes fueran sólidos. Así que en 1968, con el apoyo del doctor Gilberto Bolaños cacho, jefe de los Servicios Médicos de la Comisión de Box, buscaron un relleno que protegiera a los boxeadores y fue cuando se incorporó la crin de caballo cardada al relleno de espumado a los guantes de pelea.
Elizabeth recordó tres cambios importantes para la protección al boxeador: el guante con pulgar sujeto, las cuatro cuerdas en el ring y que en 1991 se dejaran de usar los guantes de seis onzas.
De los guantes con pulgar adherido, Mauricio Sulaimán recordó que “yo estuve en varias de las reuniones que tuvo mi papá con el tuyo. Everlast había hecho uno con el pulgar ahogado, pero le lastimaron el puño a Ray Leonard y fue tu papá, quien logró el pulgar adherido, nadie más, fue algo formidable”.
También se reconoció que fue Mauricio quien le propuso A Don Alberto Reyes el colocarle una etiqueta de caducidad a los guantes “pues la vida de los guates de pelea es muy corta, sólo de 30 rounds, ya después dejan de proteger al pugilista”, señaló Elizabeth.
Y Mauricio agregó: “Sigue pasando que en peleas de cuatro rounds, en funciones de economía limitada, le dan vuelta a los guantes en varias peleas y eso no es bueno, porque a unos guantes nuevos les entre agua, sudor y con los golpes y pierden sus características de protección y este estándar que implementamos con Cleto Reyes en una etiqueta estándar a nivel mundial, se cuida la integridad de os peleadores, pero se necesita la colaboración de todas las comisiones, manager y matchmakers para ir restando los rounds de vida útil a los guantes de pelea”.
Mauricio Sulaimán reconoció la calidad y la sencillez de la familia Reyes a lo que Elizabeth le respondió: “Tenemos la firme intención honrar ese legado y la memoria me mi abuelo, Don Cleto Reyes y de mi papá (Don Alberto Reyes). Yo crecí entre guantes, a mí sí que me cambiaban los pañales en las mesas de trabajo y amo esta actividad”.