Han pasado dos décadas desde su debut como boxeadora profesional en Miami, y en ese largo andar, Jackie Nava está convertida en una leyenda del boxeo, no sólo de México, sino del mundo y sigue activa, con la mira en ganar un nuevo título mundial y con ello decir adiós a los cuadriláteros.
Por Rodolfo Rosales S.
Han pasado dos décadas desde su debut como boxeadora profesional en Miami, y en ese largo andar, Jackie Nava está convertida en una leyenda del boxeo, no sólo de México, sino del mundo y sigue activa, con la mira en ganar un nuevo título mundial y con ello decir adiós a los cuadriláteros.
Su camino de éxito, que incluye 22 peleas de título mundial, comenzó el 29 de mayo de 2001, en el Aloha Tower Marketplace, de Honolulu, Hawái, ahí “yo no era la favorita, pero la emoción, las ganas y el deseo de triunfar, me llevaron a vencer por decisión unánime a la estadounidense Vicki Cozy”, recordó la campeona.
Jackie es, además, la primera campeona mundial del Consejo Mundial de Boxeo y fue por ello que este 15 de junio de 2021, en el Museo del Tequila y el Mezcal, en la plaza Garibaldi, la de mayor tradición en la Ciudad de México, el WBC le realizó un homenaje y le entregó un cinturón de campeona mundial de diseño especial con el número 20, en referencia a sus dos décadas como boxeadora.
Jackie llegó acompañada de sus hijas Frida y Valentina, así como de su esposo Mario Mendoza; saludó a los reporteros y luego se sentó a un lado de Mauricio Sulaimán, presidente del WBC, desde donde escuchó las felicitaciones de Irma García, Mariana Juárez, Lulú Juárez, Pipino Cuevas, Rafael “Bazooka” Limón y Eduardo “Rocky” Hernández.
Con los ojos brillándole de emoción, Jackie dijo: “Estoy nerviosa, muchas gracias. Han sido 20 años de esfuerzo, trabajo y perseverancia, pero este día no es mío sino de todo mi equipo, de mi esposo Mario, por su apoyo, de Miguel Reyes, mi entrenador, porque él fue quien creyó siempre en mí; así como de Raúl Robles y de tantas personas buenas que han estado conmigo”-
Agregó que “no puedo dejar de lado a Don José Sulaimán, que en paz descanse, por haber creído en mí y darme la oportunidad de disputar el título mundial, por su gran apoyo, como el que ahora me da Mauricio Sulaimán”.
Jackie sabe que el retiro ya está cerca “debo dedicarles tiempo a mis hijas quienes ha crecido conmigo en el gimnasio, ellas ven a su mamá entrenar box como un trabajo, pero jamás como algo violento”.
“Nosotras ya no estamos yendo, pero no nos rendimos, quiero un título mundial más. Yo me considero una campeona de la vida y antes de irme me gustaría tener peleas contra Irma García, Jackie Nava y una exhibición contra Ana María Torres”.
Por cierto, las dos emotivas batallas que Jackie sostuvo con Ana María, son consideradas hasta el momento como las mejores y más espectaculares peleas en la historia del boxeo femenino.
COSAS DEL DESTINO
Mauricio Sulaimán Saldívar, presidente del WBC utilizó en dos ocasiones la palabra destino para dos ejemplos emotivos.
“El destino marca las cosas, en el último martes de café antes de la pandemia, anunciamos la pelea entre Jackie Nava y Mariana Juárez. Hoy estamos de nuevo reunidos y ambas peleadoras están juntas para este homenaje”.
“Fue también el destino el que una niña (Jackie Navsa) que nos recomendó Erik Morales se convirtiera en la primera campeona mundial del WBC, justamente el 30 de mayo de 2005, en el cumpleaños de mi señor padre”.
Agregó que el WBC se siente orgulloso de Jackie Nava, un ejemplo de boxeadora e inspiración de las nuevas generaciones del boxeo femenil.
